Lo digo sin ironía: el momento del pesebrismo catalán y español es inmejorable. Coincido con Enric Benavent, que lo dice siempre, es difícil encontrar un período histórico con tanta gente interesada "de verdad" en el tema; un número tan grande de figuristas, todos ellos con mucho trabajo y encargos para uno y dos años a la vista; las Asociaciones permanecen (y se crean nuevas en toda España), son activas y hacen exposiciones públicas, y, finalmente, hay recambio generacional que garantiza que tengamos jubilados pastando yeso durante las próximas dos generaciones.
Por tanto, la pregunta es: ¿por qué los que escribimos aquí estamos quejándonos tanto? O para ser más concreto ¿por qué me quejo yo? Pues yo me quejo porque lo que veo no me gusta, me gusta poco o me aburre. Me encanta pasarme dos meses al año, diciembre y enero, pateándome Cataluña para ver exposiciones de belenes, y me gusta muchísimo hacer turismo por los pueblos, charlar con los pesebristas, visitar las ferias de Navidad, comprar los productos típicos, hacer el aperitivo en el casino del pueblo y... en algún momento visitar la exposición de pesebres, que entras, miras durante quince minutos, dices "qué macu" y sales sin que nada te haya mojado, ni traspasado, con el espíritu y la emoción intactos...
También el arte burgués de finales del XIX era académicamente perfecto, muy decorativo y muy comercial; nuestros admirados impresionistas eran unos bichos raros que hacían cuadros que no vendían a nadie... y lo mismo ha ido pasando con los sucesivos "ismos" artísticos, que han pasado de ser un escupitajo a la cara del espectador a convertirse en posters para el recibidor... y así va avanzando el arte...
El pesebrismo catalán se paró hace 40 años, como refleja el libro de "Els pessebres a Betlem", que durante ese tiempo ha producido obras perfectas, rigurosamente iguales año tras año. Nos hemos quedado con las figuras "buenas" de Martí Castells y con los más preciosos paisajes del Cadí o el Collsacabra. A mí esto no me "llena", pero, en realidad ¿le importa al pesebrismo en general que sus obras no "llenen" al Drake y a media docena de bichos raros más, con ciertas ínfulas intelectuales? Ya lo he dicho en la entrada, el movimiento está limitado dentro de su nicho, pero muy activo y muy autocomplacido ¿tenemos derecho a quejarnos o somos demasiado elitistas y tendríamos que entonar el "mea culpa" e integrarnos en el "mainstream" o, mejor todavía, callarnos, quedarnos en nuestro rincón con nuestras figuras y nuestros belenes caseros y no "fer la guitza"?
3 comentaris:
Per mi el problema és que les Associacions de pessebrisme legítimament a vegades sembla que potencien més l'Escola de Barcelona com a concepte que el pessebre de sobretaula, que per a mi és l'essència.
Els vents de la laïcitat mal entesa bufen en contra del pessebre i aquí és on crec que ens hem de posar forts i no deixar perdre una tradició tant arrelada.
Coincido contigo en el tema del pesebre de sobremesa... tanto que no comentaré más, ya que me gustaría hacer un comentario específico sobre el asunto.
En cuanto a la laicidad, es un asunto tan político, externo e incontrolable, que no podemos hacer prácticamente nada... salvo el voto, claro, o potenciar la parte menos "religiosa" del pesebre, es decir, las vertientes artísticas, culturales, etnográficas, etc... pero tengo que decir que a mí "no me da la gana" pq entiendo que la vertiente religiosa es MUY importante, casi tanto como los demás elementos juntos, y aunque yo no soy ni creyente ni practicante, me interesa muchísimo la exploración de la espiritualidad del ser humano, y el pesebre me sirve para reflexionar sobre lo inmaterial, lo trascendente... o como se quiera llamar... y además me fastidia muchísimo, me subleva, que TODAS las ideas sean aceptables (desde el Islam hasta el ateísmo, pasando por el budismo, el comunismo, los nacionalismos, el vegetarianismo, la new age, los extraterrestres, la gimnasia y la magnesia..) menos el catolicismo, que curiosamente es lo que ha articulado y configurado nuestra historia, nuestra filosofía y nuestra forma de ver la vida en los últimos dos mil años (y pico, ya que el cristianismo es una mezcla de cultura judeocristina y helenismo)
Siguiendo el hilo del anterior comentario, veo que este blog entiendo perfectamente mi punto de vista: aunque "El bou i la mula" no hace ningún tipo de propaganda ni proselitismo cristiano, forma parte de la "blogosfera" cristiana, ya que entiende que sus valores y su forma de ver la vida encaja con el catolicismo... no se hace énfasis en lo religioso, pero se encuadra dentro de la esfera del cristianismo. Me parece un planteamiento acertadísimo.
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